Adriana García | Carcas, Venezuela
Cuando se da la transición al Estado Moderno y la unificación política de las naciones, se vuelve necesaria la creación de instituciones que articulen cualquier tipo de actividad que se comenzará a desarrollar en la Venezuela naciente; las instituciones nacen con el desenvolvimiento del gobierno de Juan Vicente Gómez -otra dictadura-, ya que la sociedad demandaba ciertas necesidades para las cuales se requería de cuerpos administrativos que las satisficiera; por ejemplo la regularización de las finanzas públicas, la liquidación de la deuda externa, el desarrollo del ejército profesional que aseguraría el monopolio legítimo de la seguridad y la paz de todo el territorio, así como fueron importantes para la creación de condiciones básicas para la unificación económica, social, geográfica y cultural del país, junto al desarrollo de la explotación petrolera, se da lugar a la movilización social.
El partido es una organización de seres humanos para la conquista y el ejercicio del poder, el cual contribuye a la formación de la voluntad política del pueblo e intermedia entre el sistema social y el sistema político. Hay partidos ideológicos, modernos, tradicionales, partidos de cuadros, de masas, pero el denominador común es que son el nexo más efectivo entre sociedad y estado. Sin partidos no hay democracia, por eso el nacimiento de la mayoría de los partidos que conocemos hoy en día está asociado a la democracia, o al menos a la aspiración del proceso de democratización.
Un signo de la modernidad política del gobierno de Isaías Medina Angarita, que lo diferencia del de López Contreras, es el cese de la animadversión hacia los partidos políticos que había caracterizado a este último. Medina Angarita fue el primer presidente venezolano del siglo XX que reconoció públicamente que sin partidos políticos no podía haber democracia, e inclusive permitió la legalización de Acción Democrática y del Partido Comunista. El cambio de actitud de Medina respecto de los partidos políticos, contraria a la opinión de López, fue un avance. Pero esto no implicó una verdadera democratización, dado que los legalizó, pero continuaron bloqueados los mecanismos electorales de participación política que les hubieran permitido llegar al poder, debido a que se tenía el concepto de que los partidos políticos fueron los responsables del desastre del siglo XIX.
La legalización de estos partidos y el fenómeno que permitió que esto sucediera fue debido a que ese contexto político se caracterizó por un respeto a las libertades públicas como nunca antes se había conocido en la historia de Venezuela, se creía que la sociedad venezolana ya no necesitaba un tutelaje militar y que podría abrirse por completo a la democracia. Desde el surgimiento y la legalización de estos ha existido un cambio en lo que sería la esfera política, se rompe el lazo que perpetuaba la decisión de un grupo sectario de la disposición del poder; los partidos políticos surgen con la iniciativa de romper con este patrón y poder dar la oportunidad a cualquier ciudadano de poder ser representante por medio de un apoyo que se apegue a sus ideales.
El panorama de los partidos políticos desde sus primeros momentos ha sido bastante polémico con respecto al desarrollo en la sociedad; nunca han sido aceptados por completo como estos canales de comunicación capaces de regular las conductas de la población, lo que generó como consecuencia dos puntos que trataremos: el primero con relación a la persecución hacia los mismos y el segundo con respecto al desapego que se ha generado por la sociedad de no querer involucrarse en las actividades políticas que son propias de una democracia sana.
Con respecto al primer punto hay que entender que, desde los inicios de los primeros partidos -previo a su aprobación completa- como Acción Democrática, El Comité de Organización Política Electoral Independiente, La Unión Republicana Democrática o incluso el Partido Comunista Venezolano, se han desenvuelto en un ambiente muy hostil. Tras el derrocamiento de Pérez Jiménez, encontramos dos factores importantes en relación a esto. Por un lado, el miedo: quienes integraban distintos partidos políticos eran perseguidos, asesinados, torturados y, los que tenían suerte, debían vivir en el exilio. Este panorama no se consideraba muy atractivo en la sociedad que se estaba formando para ese momento. Por ende, apegarse a esta nueva mecanización de la actividad política se complicó mucho, así como sumar apoyo por parte de la sociedad civil. Por otro lado, el desconocimiento: si bien se presentaban como una organización democrática y transparente, las personas no tenían la suficiente cultura política para saber precisamente qué hacía un partido político; sencillamente lo veían como un grupo organizado de oposición sin ningún tipo de atributo relevante en específico, lo que dificultaba que se generara afinidad con los mismos.
Muchas veces se vende la perspectiva de que los partidos son gremios centralistas encargados de agrupar un grupo sectario con una sola meta en común: llegar a gobernar. Esto se ha vuelto un punto que genera desconfianza hacia las organizaciones políticas, pero debemos recordar que dichas estructuras tienen mecanismos para no ser considerados así. Dentro de sus funciones y bases tienen que actuar como un grupo de presión para manifestar necesidades y buscar solución a las mismas, a través de la opinión, la consulta, la cualidad de poder manifestarse. Descentralizar es redistribuir el poder y en los partidos políticos pueden existir varios actores importantes, lo que los vuelve un factor diferenciador de cualquier poder totalitario y un elemento esencial para la consolidación de la democracia.
En conclusión, los partidos políticos nacen en Venezuela con la iniciativa de querer cambiar el panorama político, romper con el ciclo tradicional de una elección planificada para tener un nuevo dirigente político. Pero, sobre todo, se crean para dar la oportunidad a la sociedad de poder elegir a sus representantes teniendo variedad de decisión.
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*Las ideas aquí expresadas pertenecen al autor del artículo y no necesariamente son las de FREE.
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